Hay en las muescas de tus párpados
dos trémulos pajaritos.
Entre las briznas de tus pestañas
y los henares cálidos de tus cejas,
se acurrucan temblorosas
esas aves visionarias
de fulgores y pedrerías.
Mayra :
como un vocablo antiguo
de resonancia clásica y arcaica,
tornasolea sentidos tu nombre.
A veces. ira : a veces, aura :
otras, mar y Mara.
También se transforma
en la gatita Maura.
¿ Es prudente compararte con un lirio ?
Tu misma eres esa flor nívea.
Es música cadenciosa
tu sonoro timbre.
Quien te ve sueña,
quien te sueña
con dicha te contempla.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario