Hoy la playa convocó al país.
El gentío, multitud de gallardetes
humanos, enarbolaban cuerpos y manos.
El mar arroja su danza sobre muchedumbre.
El vocerío apaga el rumor oceánico.
Las gaviotas ponen tejados de alas al mar.
Nosotros llevados por el ocio del verano,
probamos las aguas cálidas de ardiente sol.
Sentimos el mundo infinito de sensaciones
estremecer los puntos de vida interiores.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario